Crema helada de limón

{ 39 Comentarios }

crema helada de limón


Sé que hoy habrá más de una que esté emocionada por ver cómo ha funcionado el nuevo #retodetíaalia. ¿Nuevo? Sí, nuevo. ¿No te habías enterado? ¡Esas neuronas despistadas ...! Je je je. No voy a encargarme yo de hacerlo, ya que aquí lo tienes todo clarito, clarito, pero muy brevemente te diré que el reto se ha hecho viajero. Vaya, que le gusta salir, ver mundo, y disfrutarlo. Y lo mismo un día pica la puerta de tu cocina pidiendo un huequito y ganas de cocinar con él. ¿Y le vas a decir que no? Lo dudo, lo dudo mucho. Y te lo digo yo, que lo acogí meses atrás y los dos nos entendimos tan ricamente ... para quienes piensen que no hay por donde cogerle, je je je.

Paula, editora del blog Con las zarpas en la masa, ha sido quien ha inaugurado esta nueva etapa en el reto. Ella es una de las que estará ansiosa por ver cómo nos las hemos apañado con sus dos propuestas: unas sardinas con tomate o una crema helada de limón. Por mi parte os diré, y te diré, Paula, que la opción que elegí, la dulce, ha sido de lo más fácil. La receta lo pintaba así, aunque si la elegí no fue este el punto que impulsó mi elección, si no el hecho de que fuera un helado, ¡y con el calor que seguía invadiendo Madrid!; que fuera de limón; y que íbamos a disfrutar bastante más la opción dulce que la salada con sus sardinas.

crema helada de limón


Inicié este "curso bloguero" en el mes de septiembre con unos polos cremosos de lima, y cierro el mes con un helado de limón. Curioso, ¿no? Y si la vida te da limones, ¿qué haces? ¡Helado de limón! Habrá quien prefiera hacer limonada, porque guste más o porque es lo que marca el dicho. En cualquier caso de lo que se trata es de cogerle el punto positivo a la las circunstancias de la vida, que no siempre saben a dulce.

Pero aquí estamos para compartir el punto dulce de la vida: cocinar, que es lo que nos gusta. Así que vamos a ello y os explico cómo he hecho esta crema helada de limón, que es súper sencilla y muy rica.

Después de leerme, no os olvidéis pasar por Con las zarpas en la masa para ver el recopilatorio que ha elaborado con nuestras creaciones, y para descubrir cuál será el blog anfitrión de octubre. ¡Vamos! :D

crema helada de limón


Ingredientes (Para 4p)

Para la base
  • 3 limones
  • Medio litro de leche
  • 4 yemas de huevo
  • 4 cdas de azúcar blanquilla
Para el almíbar
  • El zumo de los tres limones
  • La misma cantidad de zumo que de azúcar
Para decorar
  • Unas hojas de menta
  • Rodajas de limón
Elaboración
  1. Pelamos los tres limones, evitando al máximo la parte blanca. Yo utilicé un raspador de pieles de cítricos, que me facilita mucho la labor y retira solo la parte que tenemos que aprovechar de ellas. 
  2. Cocemos las pieles en un cazo con medio litro de leche que llevaremos a ebullición. Cuando rompa a hervir, retiramos el cazo del fuego, lo tapamos y dejamos infusionar durante una hora. Al cabo de este tiempo colamos la leche y dejamos templar.
  3. Aparte batimos las cuatro yemas con cuatro cucharadas de azúcar. Una vez que no notemos los cristales del azúcar al batir, añadimos la leche reservada poco a poco. Vertemos la mezcla en el cazo y lo llevamos al fuego. Calentamos a fuego suave y removiendo constantemente. Cuando notemos que empieza a espesar, lo retiramos del fuego y dejamos templar.
  4. Para hacer el almíbar exprimimos los tres limones. Pesamos su cantidad y empleamos la misma de azúcar. En mi caso salió medio vaso de zumo, así que empleé medio vaso de azúcar. Calentamos en el fuego a potencia media alta hasta que notemos que el almíbar comienza a espesar y al coger una pequeña cantidad con la cuchara y verterlo, notamos que cae como un hilo con cierto cuerpo y peso. Retiramos y dejamos templar.
  5. Cuando la mezcla de las yemas y el almíbar hayan perdido temperatura, los mezclamos. Vertemos la mezcla en unos ramequines y los llevamos al congelador. 
  6. Servimos decorando la crema con unas hojitas de menta y unas rodajitas de limón.
crema helada de limón


Notas
  • Es importante que cuando estamos trabajando con las yemas en el fuego, la potencia no sea muy alta, ya que la mezcla se puede cortar. Si os ocurre, basta con añadir un chorrito de leche fría y remover de nuevo.
  • Cuando hacemos helados es aconsejable raspar la mezcla a medida que se vaya congelando para evitar que se formen cristales. Yo hice la prueba en dos de las cremas y lo cierto es que apenas se nota diferencia con los dos helados que no raspé. 
  • En el helado predomina el sabor cítrico, que es como a nosotras, madre e hija, nos gusta. Pero obviamente le podéis ajustar ese punto a vuestro gusto.
  • Es aconsejable sacarlos del congelador unos cinco minutos antes de tomarlos, dependiendo del calor ambiental. Si no hace mucho calor, diez minutos nos permitirán manipularlo bien.

39 comentarios han dado alegría a esta entrada:

Si tienes alguna consulta, te responderé en cuanto me sea posible. También puedes escribir un correo a cocidodesopa@gmail.com.
Muchas gracias por tus palabras y tu tiempo.

Pastel azteca

{ 30 Comentarios }

pastel azteca


La televisión nunca ha sido mi medio de entretenimiento favorito, y mucho menos desde que tengo un blog. Si he de ponerme delante de una pantalla para entretener el tiempo, prefiero que sea la del ordenador. Para mi, el televisor es un mueble más de la casa, y son otros los que la disfrutan más que yo. Pero de vez en cuando me siento delante de ella, para qué engañarnos.

Con estos antecedentes, imaginaos en qué estado de aburrimiento me encontraría yo que un día mi dedo pulsó en el mando el número de un canal de televisión en el que un tipo de aspecto nada agradable come, bueno, más bien diría yo que devora y engulle comida. Ver comer a una persona de manera descomunal para vencer un reto no me parece ni interesante ni agradable. Pero fíjate tú por donde que cuando describió el plato que se disponía a devorar me pareció de lo más interesante por los ingredientes: pastel azteca.  Lo que hice a continuación es algo que seguramente muchos de vosotros habéis hecho en repetidas ocasiones: buscar en la red cómo elaborar ese plato, ¿me equivoco?

Parece mentira que de aquel programa pudiera aprender algo (interprétese este comentario con un tono sarcástico), aunque más bien tendría que rectificar, pues fue de la red de la que aprendí cómo elaborar el plato típicamente mejicano que os traigo hoy. Esta es una versión de lo que ido viendo por aquí y por allá, y su resultado fue del absoluto agrado y aceptación de mis comensales. No fue necesario hacer la pregunta de rigor: ¿Os ha gustado? De forma unánime me dieron su visto bueno después del primer bocado. ¡Eso ... no tiene precio! :D

pastel azteca


El pastel azteca tiene el mismo formato que una lasaña, solo que se elabora con tortillas mejicanas, bien de trigo o de maíz. Y las capas se intercalan con pollo en salsa de tomate, crema de queso, queso rallado y pimiento. ¿Hay alguien a quien no le gusten estos ingredientes? Las tortillas se reblandecen y el conjunto queda de un sabor y una jugosidad maravillosas.

pastel azteca


Vamos a la receta:

Ingredientes (Para 4p)
  • 4 tortillas mejicanas de maíz (pueden ser de trigo)
  • 1 pechuga de pollo limpia de grasa
  • Un pimiento verde morrón (como los rojos que usamos para asar, pero verde)
  • El jugo del asado de la pechuga y del pimiento
  • Una lata pequeña de maíz en grano
  • 400 ml de salsa de tomate (de esta cantidad reservamos tres cucharadas para extender en la base del recipiente en el que irá el pastel)
  • 1 cebolleta mediana
  • 1 diente de ajo mediano
  • 1 chile fresco
  • 150 gr de queso Philadelphia
  • 7 cdas de leche
  • 1 brik pequeño de preparado vegetal (de venta en Mercadona) o de nata espesa
  • Queso Cheddar rallado (o de cualquier otra variedad)
  • Aceite de oliva
  • Sal
  • Pimienta
Elaboración
  1. Precalentamos el horno a 200ºC. En una bandeja de horno ponemos el pimiento verde y la pechuga, los pincelamos con aceite de oliva y salamos. En el caso de la pechuga, la sazonamos con pimienta molida. Horneamos en torno a los 40 minutos, vigilando, y cuando se hayan cocinado por un lado, le damos la vuelta. Una vez cocinados, los sacamos del horno y dejamos enfriar. Pelamos el pimiento, lo hacemos tiras finas y cortamos estas por la mitad. Desmigamos el pollo en hebras finas y reservamos ambos.
  2. En un recipiente pequeño vamos a hacer la crema de queso. Ponemos el queso cremoso y la leche juntos y mezclamos con un tenedor hasta que quede una mezcla suave y homogénea. Reservamos.
  3. Ponemos unas gotas de aceite de oliva en una sartén y calentamos, solo calentamos, las tortillas mejicanas. Las retiramos a un plato y reservamos.
  4. Quitamos la capa exterior de la cebolleta y la picamos finamente. Hacemos lo mismo con el diente de ajo. En la sartén en la que calentamos las tortillas ponemos un pelín de aceite para pochar la cebolleta y el ajo, cuidando de no dejar que el ajo se queme (amarga) y removemos con frecuencia. Cuando la cebolleta se ha reblandecido añadimos la salsa de tomate y el chile picado muy finamente y desprovisto de sus semillas. También añadimos el jugo de haber asado el pimiento y la pechuga. Sazonamos al gusto y dejamos reducir a fuego medio durante unos quince minutos.
  5. Añadimos la pechuga, removemos. Apagamos el fuego y proseguimos con el montaje del plato.
  6. Precalentamos el horno a 200ºC en modo gratinador.
  7. Extendemos tres cucharadas de salsa de tomate en la base de un recipiente apto para horno. Ponemos encima una tortilla, sobre esta una tercera parte del pollo, un puñado de maíz en grano, otro puñado de queso rallado, unas tiras de pimiento verde y unas cucharadas de crema de queso que extenderemos con una espátula de silicona. Y seguimos los mismos pasos hasta terminar con el montaje del pastel.
  8. Vertemos el brik de nata sobre el pastel y espolvoreamos con queso rallado. Gratinamos hasta que la superficie se haya dorado.
  9. Como acompañamiento resulta ideal una ensalada verde, ¡y a disfrutar!


Receta original aquí


30 comentarios han dado alegría a esta entrada:

Si tienes alguna consulta, te responderé en cuanto me sea posible. También puedes escribir un correo a cocidodesopa@gmail.com.
Muchas gracias por tus palabras y tu tiempo.

GastroMAD2014 { Encuentro de Bloggers Gastronómicos }

{ 17 Comentarios }

GastroMAD2014 es el nombre del Encuentro de Bloggers Gastronómicos que nos faltaba para cerrar un ciclo en empezó en abril de 2013. Aquella idea que surgió prácticamente de manera accidental para reunir en un punto intermedio entre Madrid y Barcelona a bloggers gastronómicos que empezaban a compartir entre las redes algo más que afición por la cocina, derivó en un evento en Zaragoza que vio su continuidad en Barcelona en el mismo año.

Y el encuentro tenía que llegar a Madrid. Y está de camino. Y llegará el próximo 18 de octubre.

Edito la entrada con fecha 27 de septiembre para comunicar que el aforo del local está COMPLETO, con lista de espera cerrada, por lo que nos vemos en la necesidad de comunicaros que no nos es posible admitir más reservas. Es triste por quienes desean venir y no pueden, pero por otro lado quienes lo organizamos nos sentimos contentas por la rapidez con la que se ha completado el encuentro :)




Quienes capitanean este tren aquí, en la capital del reino, sabemos que han sido muchas las personas que han deseado formar parte de estos encuentros. Su acogida así nos lo ha demostrado Así que desde hoy, 22 de septiembre, abrimos nuestros brazos para acoger a bloggers que quieran formar parte de este acontecimiento en Madrid.

Como estamos seguras de que el evento te va a encantar, puesto que lo que haremos gira en torno a esta fascinante afición que es la cocina, y además, hay que mancharse las manos, permítenos reservarnos el honor de la sorpresa, y que tan solo te contemos lo siguiente:
  • Fecha del encuentro: Sábado, 18 de octubre de 2014.
  • Hora de comienzo: 11:30 h
  • Hora de finalización: 18:00 h
  • Lugar: Kitchen Club, en C/ General Pardiñas, 103, Madrid. 
  • Precio de la actividad: 38 euros.
¿Qué? No querrás perderte GastroMAD2014, ¿verdad? Ya lo sabíamos nosotras ;)

Pues ve ajustando tu agenda desde YA :)

Lo que tienes que hacer para no perder tu plaza es preinscribirte en este formulario y rellenar todas las casillas. En cuanto nos sea posible te mandaremos un correo electrónico confirmando si es posible tu reserva, y de ser así, el número de cuenta bancaria en el que tendrás que hacer el ingreso. Tienes de plazo hasta el 26 de septiembre. Si no hubiera plazas disponibles en el momento de hacer su reserva, te inscribiremos en una lista de espera que se moverá en riguroso orden de preinscripción. Así que no te duermas en los laureles, porque las plazas se van a agotar volando.

¿Y qué tienes que traer? Solo tu presencia y muchas ganas de pasarlo muy bien. ¿A que seguro no te faltan?

¡Te esperamos en #EncuentroGastroMAD2014







17 comentarios han dado alegría a esta entrada:

Si tienes alguna consulta, te responderé en cuanto me sea posible. También puedes escribir un correo a cocidodesopa@gmail.com.
Muchas gracias por tus palabras y tu tiempo.

Ensalada de burrata y tomates secos con rúcula

{ 21 Comentarios }

ensalada de burrata con tomates secos, rúcula y piñones


¿Alguna vez os habéis parado a pensar en qué marca la personalidad de los seres humanos? No me voy a meter en temas trascendentales relacionados con la genética y esas cosas porque lo primero de todo: no soy quien; y lo segundo: no es el cometido de este blog. Tocando un tema que nada tiene que ver con la genética, siempre, o casi siempre, he asociado el sonido de las letras en un nombre con la personalidad de quien ha sido bautizado con él. De manera que la personalidad de "una" Alba tendría tintes más suaves que la de "una" Raquel, por ejemplo. 

"Burrata"

Una palabra que suena un tanto tosca para un queso que nada tiene que ver con el nombre que le han dado. Con lo cual, esas conclusiones de las que os hablaba arriba, se vienen al traste.

Este queso, italiano, procedente de la región de Apulia, esa que visualmente todos localizamos con el tacón de la bota, tiene una forma muy característica: un saquito que en su interior guarda una suave y cremosa mezcla elaborada con mozzarella y nata. Este saquito se conserva entre las hojas de una flor conocida como asfódelo. Tanto las hojas como el queso duran el mismo tiempo, entre tres y cuatro días, si es que el queso se ha elaborado artesanalmente. Así que si las hojas comienzan a amarillear, el queso no se encuentra en su mejor estado. 

Por lo que he podido comprobar en la red, elaborarla en casa no es difícil. Hay que desmenuzar la mozzarella. Y luego se divide la cantidad y se mezcla con nata en diferente proporción dependiendo de qué parte va a ser el relleno y qué parte la corteza. La mozzarella que será la corteza se amasa dentro de agua muy caliente y llega a adquirir la textura de la masa de pan, y a partir de aquí se va trabajando para rellenarla con la otra parte de la mozzarella y nata. Se forma un saquito y se reserva en agua muy fría. Si quieres ver el proceso con más detalle, pincha aquí

La magia de la burrata viene en el momento en el que se le da el corte: su interior se desliza suavemente e impregna los ingredientes con los que juega en el plato. Ahí es donde veremos la mozzarella en hebras y esa suave nata que le da esta particular textura. Y ese exterior elástico tan propio de la mozzarella. ¡Uuuuummmm! ¡Es totalmente irresistible!

Es un queso que queda estupendamente bien en una ensalada y con pasta. Por el momento, os presento mi versión en ensalada. Los ingredientes no están especificados. Es tan fácil elaborarla que dejo a vuestra elección la cantidad que deseéis utilizar. Tan solo os digo una cosa: ¡Está de miedo!

ensalada de burrata con tomates secos, rúcula y piñones


Ingredientes (Para 3-4 personas)
  • 1 bola de burrata (250 gramos)
  • Tomates secos hidratados en aceite
  • Rúcula
  • Vinagre de Módena
  • Aceite (de la conserva de los tomates)
  • Piñones
Elaboración

En un plato llano amplio hacemos una base con la rúcula, por encima disponemos los tomates secos y que vienen cortados en cuartos o por la mitad, y encima la bola de burrata. Espolvoreamos con piñones y aderezamos con vinagre de Módena y aceite.

Notas

A falta de burrata, puedes sustituirla por bolas de mozzarella. La sensación no será la misma, pero a falta de pan ... ;)


21 comentarios han dado alegría a esta entrada:

Si tienes alguna consulta, te responderé en cuanto me sea posible. También puedes escribir un correo a cocidodesopa@gmail.com.
Muchas gracias por tus palabras y tu tiempo.

Crumble de arándanos

{ 21 Comentarios }

crumble de arándanos


Si en el hiper en el que acostumbras a hacer la compra ves los arándanos a un precio de tirarse al suelo y patalear de la risa, ¿qué haces? ¡Comprar! ¿Y compras una tarrinita? ¡Nooo! Hay que aprovechar el tirón y comprar, pero tampoco a ciegas, eh.

¡Como se nota cuando un producto está de temporada! Aparte de lucir en su esplendor por su color y su sabor, es más barato. Que una tarrina de 125 gramos la tengas más o menos a céntimo por gramo es un precio excelente, cuando fuera de temporada se duplica su valor. Así que yo, me acerqué a unas bandejitas de arándanos, les eché un vistazo, y tras darles el visto bueno les invité a venir a mi casa. ¡Ayyyyy! "Que vais a a pasar a mejor vida", les dije. "Os voy a poner en  una bandejita y a daros calorcito en el horno con una manta crujiente hecha a base de mantequilla, harina, azúcar, almendras laminadas y coco. "¡Sííííííiíí! Queremos irnos contigo", me dijeron. Así que las tres contentas a la caja nos fuimos :)

crumble de arándanos


Tener arándanos en casa es tener buenos amigos. Ellos, tan pequeñitos, guardan un tesoro en antioxidantes. Mientras las adecentaba y les daba un agua, me contaron que sus poderes como antibacterias son sorprendentes y te ayudan a prevenir infecciones de vejiga, por ejemplo, y a tratar problemas intestinales también. Y teniendo ese sabor tan dulce y agradable, ¿cómo decirles que no cuando te piden que los pruebes? 

Tenía fé plena en que esta receta saldría muy rica. Y así fue. Esa cucharada que te llena la boca con la melosidad del arándano templado, el crujiente de la cobertura, y el frescor de la nata montada ... No me digáis que no estáis salivando, je je je.

Os cuento cómo hacer esta rica receta:

crumble de arándanos


Ingredientes

Para la base
  • 250 gr de arándanos negros
  • 1/2 cdta de zumo de limón
  • 1 cdta de ralladura de limón
  • 1 cda de harina de trigo
  • 1 y 1/2 cdas de azúcar blanquilla
  • 1/4 cdta de canela molida
Para el crumble
  • 100 gr de harina de trigo
  • 1 cda de azúcar blanquilla
  • 1 cda de azúcar moreno
  • Una pizca de sal
  • 40 gr de mantequilla sin sal en daditos
  • 2 cdas de copos de avena
  • 4 cdas de almendra laminada
  • 1 cda de coco rallado
Además
  • Nata para montar (35% M.G.)
  • Azúcar glas

Elaboración

De la base
  1. En un recipiente ponemos los arándanos lavados y secados, el zumo y la ralladura y mezclamos.
  2. Aparte mezclamos la harina, el azúcar y la canela y lo añadimos a los arándanos. Vertemos la mezcla en un recipiente para horno.
  3. En otro recipiente aparte mezclamos los 100 gramos de harina, los azúcares, la pizca de sal, la mantequilla, los copos de avena y la mitad de la almendra laminada. Incorporamos todos los ingredientes con las yemas de los dedos y con esta mezcla cubrimos los arándanos.
  4. Espolvoreamos con el coco rallado y sobre este el resto de la almendra laminada.
  5. Horneamos entre 25 y 30 minutos, o hasta que se haya dorado, a 180º y a media altura en el horno, con calor superior e inferior.
  6. Servimos acompañado de nata montada ligeramente endulzada.



21 comentarios han dado alegría a esta entrada:

Si tienes alguna consulta, te responderé en cuanto me sea posible. También puedes escribir un correo a cocidodesopa@gmail.com.
Muchas gracias por tus palabras y tu tiempo.

Futomaki { Sushi }

{ 22 Comentarios }

futomaki



Konichiwa! Ogenkidesuka? ... o lo que es lo mismo: ¡Hola! ¿Cómo están ustedes?

Más de diez mil kilómetros hemos recorrido las chicas de Directas al grano para poner nuestro granito, que no de arena, sino de arroz, y participar en nuestro reto arrocero. Entre el título de la entrada y el saludo inicial, seguro que ya sabéis hasta dónde hemos volado: ¡Japón! Y de Japón nos traemos su cocina más representativa: el sushi

Japón, y lo japonés, están de moda. Hoy en día proliferan cantidad de restaurantes de cocina japonesa en nuestro país. Quizás pensemos que es un tipo de cocina fácil, pero es de las que nunca caerían en el grupo de las que llaman "rápida", a pesar de que podemos tener en nuestros platos un rollito de sushi en nada y menos. Y es que es mucho más que eso ;)

La cocina japonesa puede presumir de ser una de las más sanas del mundo porque por un lado no emplea grasas y porque por otro se respetan al máximo los ingredientes en el proceso de manipulación con el fin de alterar lo más mínimo su sabor y su textura. Por lo que he podido descubrir leyendo libros y en información de diversa índole por este medio, en torno a la manipulación del pescado existe todo un ritual que nos confirma la sensatez, la delicadeza, el cariño y el respeto que los japoneses ponen en este tema. 

Este es uno de los retos que más me apetecía encarar. Por un lado porque nunca antes había hecho sushi en casa, y por otro, porque me apetecía mucho saber más sobre la gastronomía japonesa. Lo que sí tenía por seguro es que iba a gustar, porque en casa nos gusta el sushi. ¡El éxito estaba asegurado! Pero eso sí, se requiere tiempo para ello. No es un tipo de comida que se pueda elaborar para unas prisas. 

No sé si os pasará, pero cuando pronuncias la palabra "sushi" la mayor parte de la gente lo asocia con el pescado crudo, y ese es un punto que no suele atraer a muchos. Hablar sobre eso me podría dar para una, dos o tres entradas más porque este es un mundo amplísimo. Pero lo que no quiero es aburriros, y a grosso modo os diré que el pescado crudo en sí se denomina "sashimi", mientras que el sushi, como la propia palabra indica (shi, arroz; su, vinagre) se refiere a cualquier elaboración en la que el arroz es el protagonista, pero con él juegan otros ingredientes, mayormente frescos, de origen animal o vegetal, tantos como gustos hay. 

La elaboración de sushi que os invito a conocer hoy es el futomaki. El futomaki es un rollo de sushi grueso, en el que el arroz queda arropado por un alga nori. Es quizás un poco más incómodo de comer que otros tipos de sushi porque no se puede comer de un solo bocado, que es lo ideal. Y es que en realidad es un rollo grande de sushi. 

Al ser la primera vez que elaboraba sushi he querido ceñirme a lo más clásico e ir a lo seguro, que para innovar ya habrá tiempo. He escogido ingredientes habituales para centrarnos mayormente en la técnica.

Para cocer el arroz para sushi he utilizado una arrocera, la Rice & Grain Cooker de Lékué, acompañada de una esterilla de silicona especial para el formado del sushi y que se comercializa con el nombre de Kit Sushi. La esterilla es muy fácil de usar por la propia manejabilidad de la silicona de la que está hecha. La he protegido con film transparente, aunque podemos prescindir de él. Me ha gustado mucho el resultado conseguido al cocer el arroz en esta arrocera, ya que queda perfectamente entero y sin abrirse. Y si no, echad un vistazo a cómo queda en grano en la foto. Salta a la vista, ¿verdad?

Así que no me enrollo más, y nos vamos a "sushiar"  …)

futomakiIngredientes (Para 16 piezas en total)

Para cocer el arroz
  • 185 gr de arroz especial para sushi
  • 260 ml de agua
  • 90 ml de vinagre de arroz
  • 25 gr de azúcar
  • 3/4 cdta de sal
    • (Tomamos como referencia para cocer preparar el arroz para sushi necesitamos 100 ml de vinagre, 30 gr de azúcar y 1 cdta de sal por cada 200 gramos de arroz)
Para el futomaki
  • 2 alga nori
  • Un trozo de atún rojo (aproximadamente 100 gramos - sobrará)
  • Mango
  • Pepino
Además
  • Jenjibre encurtido
  • Wasabi
  • Un abanico
Elaboración

Cocción de arroz
  1. Empezamos preparando el condimento para el arroz poniendo el vinagre, el azúcar y la sal en un cazo. Lo ponemos a calentar, removiendo de vez en cuando hasta que se haya disuelto el azúcar. Lo retiramos y dejamos templar. 
  2. Ponemos el arroz en un recipiente amplio y lo removemos enérgicamente para que desprenda el almidón. Tiramos el agua y lo lavamos entre 5 y 7 veces más hasta que el agua salga transparente. Tras el último aclarado dejamos el arroz cubierto de agua y en reposo durante 15 minutos. Transcurrido este tiempo tiramos ese agua y pasamos a cocerlo.
    1. Si lo cocemos en la arrocera para sushi de Lékué, ponemos el arroz con el agua en la arrocera y lo cocemos en el microondas a 800w de potencia y durante 17 minutos. Después de este tiempo lo dejamos reposar cinco minutos y le añadimos el condimento de vinagre poco a poco a medida que vamos mezclando. Este condimento dará brillo y una textura pegajosa al arroz. En esta arrocera el grano queda en perfecto estado de cocción: muy enterito y muy fácil de manipular. Por no hablar de lo rápido y limpio que resulta :)
    2. Si lo cocemos en un cazo, ponemos el arroz y el agua en una cazuela con tapa, llevamos a ebullición y cocemos durante 5 minutos a fuego medio y tapado. Apagamos el fuego y sin destapar la cazuela dejamos que repose diez minutos. Si quedara algo de agua en el centro del arroz, lo dejamos reposar un par de minutos más hasta que veamos que ha sido absorbida. Añadimos entonces el condimento poco a poco a medida que vamos mezclando. Este condimento dará brillo y una textura pegajosa al arroz
  3. Pasamos el arroz a un recipiente de madera, que absorbe mejor la humedad, o en su defecto, una fuente amplia y removemos y abanicamos el arroz para atemperarlo y que vaya perdiendo temperatura. Una vez que ha sido enfriado, lo cubrimos con un paño húmedo para evitar que el arroz se seque.
Kit Sushi de Lékue

Del futomaki
  1. Preparamos la esterilla, mejor si la protegemos con film transparente par evitar que se peguen los granos de arroz. Sobre la esterilla ponemos un alga nori, que tiene dos caras: una más rugosa y otra más brillante. Ponemos la parte más rugosa hacia arriba, que es donde extenderemos el arroz, para que se agarre. 
  2. Nos humedecemos las manos y cogemos una bola de arroz grande y la extendemos sobre el alga. No han de quedar huecos libres entre el arroz pero ha de quedar bien extendido y nada apelmazado. Cubrimos toda la superficie con más arroz, pero dejando dos centímetros libres en los extremos más largos del alga y que son paralelos a nosotros. 
  3. Hacemos una suave presión sobre el arroz y colocamos en el centro unas tiras de atún rojo crudo y en paralelo unas tiras de mango y otras de pepino, que habremos pelado y desprovisto de las pepitas de su interior. 
  4. Para enrollar, con los dedos pulgares agarramos la esterilla por la parte más cercana a nosotros. Los demás dedos sujetan la parte superior de la esterilla y los ingredientes para que no se salgan. Empujamos con los pulgares y empezamos a enrollar atrapando los ingredientes con el alga y ejerciendo una suave presión sobre ellos con la esterilla. Llevamos el rollo a uno de los lados laterales de la esterilla, sobresaliendo un dedo, y presionamos para igualar los extremos y que queden lisos. Lo mismo con el otro lado. Al final arropamos el cilindro con la esterilla, presionamos suavemente para darle una forma cilíndrica o cuadrada bonita.
  5. Para cortar los futomaki, con un cuchillo humedecido en agua cortamos el cilindro por la mitad, y cada mitad en dos. Al final obtendremos ocho futomakis de similar tamaño. 

Notas
  • Según la tradición, el sushi se acompaña de jengibre encurtido. Dicen que tiene la función de "limpiar la boca" antes del siguiente bocado, cuando lo que queremos es probar un bocado diferente. El jengibre deja un aliento fresco y al mismo tiempo picante.
  • Acompañaremos el sushi con un pequeño recipiente con soja y un poquito de wasabi, y ojito con el wasabi, que pica un mundo. Impregnamos ligeramente el sushi en la mezcla. Si lleva pescado en el exterior, lo hacemos por el lado del pescado. 
Y no os olvidéis de visitar las cocinas de mis compis de reto porque si sois amiga@s del sushi, seguro que sus propuestas os encantarán:


Sayonara! ... o lo que es lo mismo ... ¡adiós!


Fuente: Sushi, Editorial Susaeta

Entrada patrocinada por Lékué.


22 comentarios han dado alegría a esta entrada:

Si tienes alguna consulta, te responderé en cuanto me sea posible. También puedes escribir un correo a cocidodesopa@gmail.com.
Muchas gracias por tus palabras y tu tiempo.

Crema de manzana verde, aguacate y hierbabuena

{ 31 Comentarios }

crema-de-manzana-verde-aguacate-y-hierbabuena


Después de unos meses de inactividad, primero por tema de estudios, y después por vacaciones, volvemos a la carga en Cocido de Sopa. Hoy, segunda entrega de la nueva temporada. Y había ganas de publicarla. ¡Y muchas!

Para aquellos que os preguntéis en qué resultaron esas oposiciones para las que me estuve preparando meses atrás, os diré que que aunque no logré plaza, mi posición es bastante buena y eso hará que tenga trabajo para los dos próximos cursos, que estando el tema laboral tal cual está, no hace si no sentirme feliz y contenta, y muy afortunada, aunque la suerte no viene sola, y sea cual sea el destino que me espera :)

crema-de-manzana-verde-aguacate-y-hierbabuena


Dar vida al blog de nuevo es una más de las rutinas cotidianas. Todos estamos deseando que lleguen las vacaciones para respirar otros aires, para tomar nuevos hábitos, para relajarnos, para entregarnos al ocio, a la familia, pero como somos seres llenos de contradicciones, al final lo que estamos deseando es volver a la rutina que gobierna nuestras vidas. Supone poner parón a cierto "descontrol" que aunque nos gusta, al final, nos acaba angustiando. Al menos a mi me pasa, y muy especialmente en lo relativo a la comida. Una se desmadra, aperitivea más de la cuenta, desordena su dieta y eso acaba pasando factura a nuestro cuerpo. ¿O no?

Pues para empezar a poner orden en nuestra dieta os traigo una crema que ya he hecho innumerable cantidad de veces en lo que va de verano. Esta es mi versión de una Sopa volouté de aguacate, manzana y yogur que a principios de verano Virginia, que gestiona el precioso blog Sweet & Sour nos presentó. Estoy segura de que todos los que me seguís conocéis el blog del que os hablo. Es tan maravilloso como quien lo edita, Virginia, a quien tengo la afortunada suerte de conocer en persona y de cuya compañía, y de la de su marido, pudimos disfrutar en uno de los días que pasamos en nuestras recientes vacaciones en el País Vasco.

El que un día cualquiera no dispusiera de algunos de todos los ingredientes necesarios para elaborarla, hizo que versionara su receta. No es ni mejor ni peor que la de Virginia, que en casa nos encanta, pero a mi parecer, el punto de la hierbabuena le otorga un frescor muy en consonancia con el sabor de la manzana verde, que nos deja un suave regusto en la boca. Y a falta de caldo, agua, más neutra, y así no mitiga el fresco sabor del resto de los ingredientes.

Os cuento cómo hacerla:

crema-de-manzana-verde-aguacate-y-hierbabuena


Receta de crema de manzana verde, aguacate y hierbabuena


Ingredientes (4p)
  • 2 aguacates maduros pero firmes
  • 1 manzana verde
  • 250 gr de yogur griego
  • El zumo de una lima
  • Ralladura de media lima
  • 25 hojas de hierbabuena de tamaño mediano (o al gusto)
  • 500 ml de agua (o algo más, dependiendo del grado de espesor que nos apetezca)
  • Sal y pimienta
Elaboración
  1. Abrimos los aguacates por la mitad, retiramos el hueso dando un golpe seco en medio y girando el cuchillo clavado en el hueso con cuidado. Es recomendable sujetar el aguacate con un paño de cocina tanto para sujetarlo bien como para evitar que con el giro del cuchillo nos cortemos. Quitamos la pulpa con una cuchara y la ponemos en un vaso para triturarlos.
  2. Pelamos la manzana, la descorazonamos, la cortamos en daditos y la añadimos al vaso. Exprimimos la lima y añadimos su zumo, junto con la ralladura, al mismo vaso.
  3. Lavamos y picamos las hojas de la hierbabuena y las añadimos al vaso.
  4. Vertemos los yogures, el agua y sal y pimienta al gusto. Trituramos. Si lo hacéis con la thermomix 31, en velocidad progresiva 5-10 durante 2 minutos. Ha de quedar una crema de textura sedosa y fina. Si no fuera así, añadís más tiempo hasta que quede tal cual se puede apreciar en las fotografías. 
  5. Vertemos en un recipiente para guardar la crema en la nevera.
  6. La servimos bien fresquita en vasos individuales y adornada con unas hojitas de hierbabuena.
Notas

  • Si hacemos la crema para tomarla en el momento, la fricción de las aspas de la thermomix hace que la crema se temple. Para tomarla fresquita podemos sustituir parte del agua por hielos y picarlos conjuntamente una vez que el resto de los ingredientes estén triturados.

31 comentarios han dado alegría a esta entrada:

Si tienes alguna consulta, te responderé en cuanto me sea posible. También puedes escribir un correo a cocidodesopa@gmail.com.
Muchas gracias por tus palabras y tu tiempo.

Ceviche de corvina

{ 26 Comentarios }

ceviche de corvina


Hace unos añitos, allá cuando una era una niña, me horrorizaba cuando veía a mi madre hacer dos cosas que nunca me han gustado. Una, limpiar pescado; y dos, comerlo crudo.

La primera tarea, que en sí lo es, pues forma parte de la logística de nuestra compra, la he medio superado. Tengo que hacerla y la hago. Reconozco que mientras viví con mis padres nunca limpié pescado, y la primera vez que lo hice, ya emancipada, lo pasé, francamente, muy mal. Con el tiempo, al convertirse en una rutina que no tengo más remedio que hacer, la he ido superando, pero no es de mi agrado. Cuando yo era jovencita, otra de las tareas que aborrecía hacer era fregar, y hacía un pacto con mi madre: planchar a cambio de fregar. Esta otra tarea la encontraba más amena, pues me permitía escuchar música o ver la televisión mientras tanto. Para mi, ni una ni la son comparables. Si me fuera posible, pactaría con alguien el limpiar el pescado mientras me dedico a otra faena. Pero va a ser que mejor no fantaseo y planto los pies en la tierra, que es donde tienen que estar.

La otra tarea, la de comer pescado crudo, pues es un hábito que ha ido entrando en mi vida poquito a poco, y oye, si os soy franca, me gusta. No es que le haga ojitos a todos los pescados, pero me gusta. Me gusta comer salmón crudo, atún (si es rojo, mejor), langostinos, también he probado el pez mantequilla, y ahora ... corvina.

No sé si conoceréis la corvina. Para mi era un pescado totalmente desconocido hasta que una noche lo cené en un restaurante, y cocinado de la misma manera que os traigo hoy. Bueno, realmente, donde dice "cocinado" debería decir "elaborado", porque la corvina va en crudo, aunque eso sí, macerada en zumo de cítricos, lo cual hace que al final el pescado acabe de alguna manera cocinada.

El ceviche de corvina es, además, uno de los platos autóctonos de la cocina peruana, una cocina que descubrí hace ya unos meses en un restaurante en Madrid, y aunque fusionada con la cocina mediterránea, me asombró su creatividad. 

Hacer un ceviche es tan fácil ... No se necesitan ni cantidades exactas. Picas la corvina y la aderezas a tu gusto según el toque de acidez, y de picante, que tu paladar admita. Aún así, yo te explico cómo hacerlo y con qué cantidades, adaptado a mis gustos, claro. Y es que en casa solo me gusta a mi :)

Ingredientes (Para 2 personas)
  • 300 gr de corvina, en lomos limpios, sin piel ni espinas, picada en daditos de 2x2 centímetros
  • Media cebolla morada picada finamente en brunoise
  • 1 chile fresco picado en medias lunas
  • 1 diente de ajo, descorazonado, y muy finamente picado
  • Zumo de un limón
  • Zumo de una lima
  • Una cucharada de cilantro fresco lavado y picado
  • Sal
  • Un chorrito de aceite de oliva
Elaboración
  1. En un recipiente ponemos todos los ingredientes, excepto el aceite, y mezclamos. Os aconsejo no añadir todo el zumo de limón y de lima de una vez, sino añadirlo a medida que lo vayáis probando y para ajustarlo a vuestros gustos.
  2. Tapamos el recipiente con film transparente y guardamos en la nevera durante unos diez minutos.
  3. Removemos de nuevo antes de servir en los platos y rematamos con un chorrito de aceite de oliva.

26 comentarios han dado alegría a esta entrada:

Si tienes alguna consulta, te responderé en cuanto me sea posible. También puedes escribir un correo a cocidodesopa@gmail.com.
Muchas gracias por tus palabras y tu tiempo.

Polos cremosos de lima

{ 35 Comentarios }

polos cremosos de lima


¡Toc-toc! ¿Hay alguien ahí? ¡Síííííííí! Ya veo que sí, que me estás leyendo, y tú también, y ahí te veo a ti por allí. ¡Qué bien volver! Volver al blog y a toda la vida que trae consigo.

Espero que hayáis disfrutado de vuestras vacaciones. Cada uno a su manera, que opciones siempre hay para elegir: mar, montaña, campo, pueblo ... Nosotros nos escapamos al norte, como solemos hacer, y más en concreto al País Vasco, buscando temperaturas más frescas que las que son habituales por Madrid. Y me había olvidado de lo que es el efecto del calor acompañado de humedad, je je je. Pero lo pasamos bien, comimos bien, descubrimos nuevos parajes ... Ahora toca esperar a las vacaciones del verano que viene, pero no pensaremos mucho en ellas para que la espera no se nos haga larga ;)


polos cremosos de lima


Esta entrada ha estado en un tira y afloja durante unas horas. Ya sé que el mundo no se iba a derrumbar por tomar una decisión precipitada, pero me gusta publicar recetas que tengan alguna razón de ser publicadas en el momento que salen a la luz. Estamos en septiembre, y aunque en los últimos años parece que el verano se alarga algo más de lo que acostumbraba tiempo atrás, al menos por Madrid, puede que la tentación de un helado no sea tan poderosa como si nos plantamos en pleno mes de julio o de agosto. Así que pensé dejarla pendiente de publicar para el verano de 2015. 

Lo cierto es que estos polos son ... ¡tan absolutamente deliciosos! ... y ... ¿cómo hacerlos esperar hasta el año que viene? 

La dicotomía diablo-ángel iniciaron su juego interpretando cada uno el papel que le correspondía.

En el hombro izquierdo tenía sentado a un diablillo con el corazón de Virginia, de Sweet & Sour, que me susurraba en la oreja de forma tentadora con un "¡Publícalos, publíííííííííícalos!" ¡A ver! Qué va a decir la artífice original de esta receta, enterada ella de que había elaborado, catado y fotografiado sus polos. A todos nos gusta ver cómo nuestras elaboraciones se pasan de boca en boca, y nunca mejor dicho ;)

En el hombro derecho tenía sentada a la voz de la cordura, la que me decía que lo más sensato era dejarlos para el verano siguiente, cuando habría quien sucumbiendo a los calores estivales, se dejaría llevar por estos deliciosos polos.

¿Al final quién ganó? Está claro ... ¿no? Aunque a su favor he de decir que me ayudaron algunos de mis seguidores por Facebook ;)

polos cremosos de lima


¿Os había dicho que estos polos son ... deliciosos? No puedo reprimirme decirlo una tercera vez, y si es necesario, lo vuelvo a repetir, je je je. De todos los polos o helados que he elaborado en casa, ninguno es tan, tan cremoso, ni tan fácil de elaborar. Podría llamarlo "helado milagro" porque la mezcla láctea deja de ser líquida para pasar a ser súper cremosa y densa en el mismo momento en el que el zumo de lima entra en juego. Al principio da la impresión de que la mezcla se va a cortar, pero en cuanto comenzamos a mezclar los ingredientes con energía, la textura cambia para convertirse en cremosa y sedosa. 

Estos polos pueden no llegar a serlo si pasamos a un plan B y guardamos la mezcla en la nevera como una sencilla crema de lima que tomaremos fresquita. Es altamente adictiva, os aviso ;)

polos cremosos de lima


Con tales apelativos, estaréis deseando saber cómo prepararlos, ¿verdad?

Pues vamos a ello:

Ingredientes (Salen entre 6 y 8 helados, dependiendo de la polera, en mi caso de Ikea)
  • 400 ml de leche condensada
  • 250 ml de nata líquida
  • 2 cdas de ralladura de lima 
  • Una pizca de sal
  • 100 ml de zumo de lima (aproximadamente el zumo de tres limas)
Elaboración
  1. En un recipiente mezclamos la leche condensada, la nata y la pizca de sal con la ayuda de unas varillas manuales.
  2. Añadimos la ralladura de lima y mezclamos.
  3. Incorporamos el zumo de lima y seguimos mezclando.
  4. Vertemos la mezcla en unos recipientes aptos para llevar al congelador y conseguir nuestros polos. Una vez estén llenos, conviene golpearlos suavemente contra la encimera para asegurarnos de que no queden burbujas de aire en su interior.
  5. Llevamos al congelador, ¡y listo!
Notas
  • Aunque descongelan muy fácilmente, para asegurarnos de una manipulación sencilla, es recomendable sacarlos del congelador cinco minutos antes. O bien sumergirlos en agua caliente durante cinco segundos, no más.
  • Para aseguraros de que no queden burbujas como me pasó a mi con todos, aparte de golpearlos suavemente contra la encimera de la cocina, podéis remover la crema con una cucharita de café.




35 comentarios han dado alegría a esta entrada:

Si tienes alguna consulta, te responderé en cuanto me sea posible. También puedes escribir un correo a cocidodesopa@gmail.com.
Muchas gracias por tus palabras y tu tiempo.